domingo, febrero 11, 2007

Mala distribución del gasto público en educación

Desde los gobiernos revolucionarios, el discurso político ha apostado por la educación, ese discurso no ha cambiado con la entrada del nuevo gobierno federal que "le apuesta a la educación". Sin embargo, esta apuesta no se sustenta por los resultados obtenidos. Para la OCDE el gasto público del sector educativo está mal distribuído. Y cuando el río suena...

Algo no funciona muy bien en un país que se considera democrático cuando el gasto que se utiliza para abastecer de comida a el avión presidencial es mayor que el que obtiene el sector educativo de un estado como Oaxaca. ¿Es una mejor inversión para México alimentar al gabinete presidencial que ofrecer una educación de mayor calidad en alguno de los estados federales?

Otro ejemplo, ¿Es mejor alimentar al sr. Secretario de Hacienda que puede gastar 2 mil 831 pesos diarios (257 dólares americanos) en sus comidas cuando el estado de Querétaro no puede atender a los niños y niñas del nivel preescolar? No dudo que la importancia y la cantidad de trabajo de un secretario de estado sea arduo, pero ¿en un país que dice vivir en democracia es ético?

Los resultados de la Prueba ENLACE nos muestra la realidad que existe en muchos lugares de México:
  • Una de las niñas que obtuvo puntajes más altos en lenguaje asiste a una escuela que tiene problemas de luz eléctrica; si encienden las computadoras tienen que apagar la bomba que envía el agua para los sanitarios. Si prenden la bomba tienen que apagar las computadoras. La descripción que hace la niña de su escuela es: "No tiene luz".
  • El primer lugar nacional en aprovechamiento escolar no es suficiente para las niñas y los niños de la escuela primaria rural vespertina Francisco I. Madero que lo ganaron. El premio no les da de comer ni ha mejorado la situación de sus familiares, incluso piensan en emigrar a Estados Unidos, ya que en Guanajuato, la llamada "tierra de oportunidades", no hay futuro. Algunas de las niñas que obtuvieron puntajes altos, ya no asisten a la escuela. La SEP les ha prometido llevar a la escuela computadoras, pero en la comunidad no existen líneas telefónicas...
Tal vez, el problema no radica en el tipo de gobierno que existe en México, es probable que a la democracia mexicana le hace falta un componente ético, especialmente de aquellos que se encuentran cercanos a los círculos de poder.

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