martes, enero 22, 2013

diabetes: información y educación

Las formas de trabajo actuales son fuente de mala salud y de enfermedades crónicas. Las máquinas han reemplazado el esfuerzo físico y las personas pasan horas sentadas para realizar su trabajo:

Pasar las horas sentado en la oficina es una actividad que perjudica seriamente a la salud según avalan numerosos estudios que ensalzan los beneficios de trabajar de pie para hacer frente al sedentarismo. Compañías como Google, Facebook, Chevron, Intel o Boeing son algunas de las que han dado la bienvenida en sus despachos a las mesas altas por el bien de sus empleados, que aseguran sentirse mejor tras deshacerse de sus sillas. Las investigaciones realizadas durante los últimos años avalan esa impresión. La obesidad, la diabetes, los problemas cardiacos o el cáncer se citan recurrentemente como las enfermedades a las que se expone el oficinista cuya vida sedentaria podría llevarle a la tumba antes de tiempo. Científicos del Pennington Biomedical Research Centeren Luisiana determinaron que la gente que pasa la mayor parte de su tiempo sentada tiene un 54% más de posibilidades de morir de un infarto, datos que se desprenden de un estudio sobre el estilo de vida de más de 17 mil personas. Las horas de pasividad muscular continuada ralentizan el metabolismo y reducen la producción de enzimas, al tiempo que exponen al organismo a niveles anormales de glucosa y colesterol. Más que sudar la camiseta levantando pesas, la clave está en ponerse de pie. Simplemente con pasar las horas erguido el cuerpo quema un 40 por ciento más de grasa. Las experiencias recogidas en internet de quienes han probado trabajar de pie con su computadora en una mesa adaptada, en vez de sentados, coinciden en destacar que después de unos días de entusiasmo en los que aumentan su productividad, el organismo se cansa, aparecen dolores y se echa de menos la silla. La respuesta es algo intermedio. No hace falta estar de pie todo el día, basta con hacer pausas para estirar, moverse y, si es posible, 10 minutos de ejercicio a media jornada.

En México, la diabetes en un problema de salud serio:

La mitad de las personas que tienen diabetes lo saben: 6.4 millones, equivalentes a 9.1 por ciento de la población mayor de 20 años. Significa que al sumar a los individuos que desconocen su condición de diabéticos, la prevalencia de la enfermedad en el país es de 18 por ciento; 8 puntos más que en 2006, reveló la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) 2012. En los 12 años recientes, la frecuencia del mal creció 60 por ciento, pues pasó de 5.7 en 2000 a 9.1 en 2012. La mayor afectación está en la población femenina mayor de 60 años, que reporta una prevalencia de la enfermedad de 26 por ciento; es decir, un incremento de 37 por ciento con relación a 2006 cuando era de 19 por ciento. Entre las mujeres de 40 a 59 años, la Ensanut 2012 encontró que 14 por ciento tiene el padecimiento, 40 por ciento más que en 2006 cuando fue 10 por ciento. En cambio, para los hombres las cifras son en este año: 15 por ciento para los mayores de 60 años y 9 por ciento para los que tienen entre 40 y 59 años. Son las mismas que las obtenidas en 2006.

Sin embargo, muchos legisladores mexicanos se han opuesto a regular la venta de comida chatarra; aquella que tiene exceso de grasas y carbohidratos. La regulación sigue su lucha en el congreso mientras los estudiantes mexicanos se atiborran de dulces y refrescos de las tienditas escolares:

La comisión de Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados aprobó elevar a rango constitucional la prohibición de vender en todas las escuelas alimentos “que no favorezcan la salud de los educandos”, a pesar de las presiones de cabilderos que representan a empresas privadas dedicadas a la producción de productor alimenticios altos en grasas y azúcares. “Hoy en la reforma de educación ya establecimos las reglas del cómo vamos a trabajar en ella. Los tres partidos mayoritarios vamos a establecer la ruta de política pública del Estado sin aceptar presiones de nadie”, aseguró el diputado perredista Fernando Zárate, quien admitió que los cabilderos intentaron detener la aprobación de este artículo en el dictamen. La propuesta del Presidente avalada por todos los partidos políticos y consensada con sectores inmersos en la educación, prevé incluir en el artículo tercero constitucional el tema de la alimentación de los educandos.

La investigación muestra la importancia del conocimiento y el uso de sustancia naturales para combatir la diabetes:

Durante unos 50 años, comunidades indígenas mexicanas han controlado los niveles de glucosa entre las personas que padecen diabetes mellitus tipo 2 con una infusión de las hojas de un árbol llamado guarumbo. Con base en ese conocimiento empírico, Adolfo Andrade Cetto, investigador de la Facultad de Ciencias de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), luego de una investigación de al menos dos décadas demostró que esa sustancia natural tiene un efecto hipoglucemiante, similar al fármaco conocido como metformina, usado en los tratamientos convencionales para controlar la glucosa en pacientes diabéticos tipo 2. Hace ocho años, el investigador colaboró con Cristina Revilla Monsalve, del Centro Médico Siglo XXI del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en la realización de un protocolo con pacientes humanos. El té –elaborado mediante un método tradicional y bajo estricto control químico de calidad– se le proporcionó a ocho pacientes con diabetes tipo 2, durante 66 semanas, pues el mecanismo de acción tiene efecto a largo plazo, y también se controlaron los niveles de glucosa. La información, dada a conocer por la UNAM, asienta que, debido al avance de sus estudios, actualmente el universitario busca financiamiento para patentar el método de extracción y de acción de la planta.

Pero, el gobierno actual, como el del siglo XVI prefiere la importación de conocimiento y tecnología:

Estará disponible en México un nuevo medicamento para el tratamiento de la diabetes, con más capacidad para su control y la prevención de complicaciones, como la insuficiencia renal crónica, informó Mikel Arriola, titular de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).  El producto para la diabetes, fabricado por un laboratorio europeo, se desarrolla desde hace varios años y México forma parte del estudio multinacional en el que participan más de 20 países para comprobar su eficacia, calidad y seguridad. Arriola consideró que a partir de la reforma al reglamento sanitario, los laboratorios farmacéuticos que producen medicamentos innovadores aumentarán la investigación clínica de sus productos en el país, lo que a su vez generará mayor inversión en infraestructura en el sector y se aprovecharán de mejor manera los recursos disponibles en los institutos nacionales de salud.

El gobierno federal, los gobiernos estatales y la sociedad mexicana gasta una enormidad de dinero y tiempo en atender las consecuencias de una enfermedad que se puede prevenir y controlar con: educación y ejercicio. Pero, las ideas actuales impiden que se tomen sencillas decisiones y se prefiera tener una sociedad enferma de manera crónica. Tres remedios simples: a) obtener información sobre la diabetes; b) alimentarse de forma adecuada y c) hacer ejercicio de forma regular. ¿Qué esperas?






No hay comentarios: