Oaxaca, después Morelos, ahora es Guerrero. Los conflictos originados por la firma del Acuerdo por la Calidad de la Educación han provocado todo lo contrario a lo esperado. Este acuerdo ha creado cierres de escuelas, marchas, toma de carreteras, uso de la fuerza pública, y un largo etecétera. Lo más contradictorio es la defensa de los maestros en usos y costumbres poco relacionadas con una cultura democrática, tales como la herencia de plazas. Las expectativas creadas en el año 2000 de alcanzar una democracia madura no se han cumplido todavía:
El Congreso de Guerrero aprobó un punto de acuerdo en el que convoca al gobernador Zeferino Torreblanca Galindo a que de manera inmediata reciba a la comisión negociadora de la disidente Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG), “para dar solución al pliego de peticiones con relación a la Alianza por la Calidad de la Educación (ACE)”.
Los maestros de Guerrero que rechazan la Alianza por la Calidad de la Educación mantenían cerrada la Autopista del Sol, después de que se rompió nuevamente la negociación que habían concertado con el secretario de Educación estatal, José Luís González de la Vega. Mientras tanto, cientos de agentes de la Policía Federal Preventiva y de la Policía Estatal fueron desplegados en las inmediaciones del bloqueo, en espera de una orden para desalojar a los mentores.
Integrantes del Sindicato de Trabajadores Técnicos, Administrativos y de Intendencia al Servicio de la Universidad Autónoma de Guerrero tomaron la Rectoría de la institución en demanda de solución urgente a su pliego petitorio. Los inconformes exigen la contratación de 43 plazas que quedaron vacantes y contempladas dentro del techo presupuestal por la universidad y que se ocupen los espacios de quienes han sido jubilados, debido a que el rector no ha querido hacer las contrataciones correspondientes. De esta forma, fueron cerrados los principales accesos de la Rectoría, donde no se permitió el ingreso del personal administrativo, ni del rector, Arturo Contreras Gómez.
Al continuar suspendidas las negociaciones entre las autoridades de Guerrero y la dirigencia de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación, los maestros que rechazan la Alianza por la Calidad de la Educación bloquearon nuevamente el Congreso local. Los maestros, que ya cumplieron mes y medio en paro laboral y en plantón afuera del palacio de gobierno, pedirían a los diputados su intervención ante el gobernador Zeferino Torreblanca para que no firme la alianza; sin embargo, cuando llegaron al Congreso local los diputados habían abandonado el edificio, mientras que el personal también fue evacuado.
Decenas de maestros disidentes de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación (CETEG) bloquearon en ambos sentidos la costera Miguel Alemán, destrozaron parabrisas de autos particulares, tomaron por unos minutos la caseta de cobro de La Venta en la Autopista del Sol y abortaron una reunión con autoridades estatales de Educación en rechazo a la Alianza por la Calidad de la Educación y en demanda de una audiencia con el gobernador Zeferino Torreblanca.
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