lunes, octubre 17, 2011

de títulos falsos, rezago educativo en burócratas y exámenes de oposición

Unos de los problemas persistentes en México es el rezago educativo. Este rezago permea en varios niveles. Por ejemplo, la burocracia sigue empleando personas que no han terminado la educación básica:

 Más de mil 500 empleados del gobierno de Sonora no han terminado la educación básica y cerca de 4 mil carecen de título de licenciatura, informó Miguel Méndez Méndez, director de recursos humanos del poder Ejecutivo estatal, quien firmó un convenio de colaboración con nueve instituciones de educación media y superior para acabar con ese rezago. Aseguró que 89 por ciento de los casi 10 mil burócratas de la entidad están dispuestos a seguir estudiando.

El rezago educativo y la dificultad para titularse en los estudios universitarios, se combinan con la corrupción. Todavía se encuentran servidores públicos que entregan títulos universitarios falsos:


La Secretaría de la Función Pública (SFP) presentó 21 denuncias penales ante la Procuraduría General de la República (PGR) y elabora otras 11 por el delito de usurpación de profesión, contra 32 servidores públicos que entregaron cédulas y títulos profesionales falsos. Investigaciones realizadas por la dependencia en 2011 descubrieron que 36 servidores públicos presentaron documentación apócrifa al ingresar a las secretarías del Trabajo y de Salud. También a los institutos Mexicano del Seguro Social y Nacional de Salud Pública, al Hospital Juárez de México y al Centro de Recursos Educativos Avanzados en Chiapas. De las cédulas y títulos profesionales falsos detectados, 23 corresponden a personal de mandos medio y superior: una dirección general, dos direcciones generales adjuntas, ocho direcciones de área, cuatro subdirectores y ocho jefes de departamento; otros ocho documentos falsos corresponden a personal de apoyo.

La falta de trabajo con prestaciones, la precariedad de los salarios, y el temor de perder el trabajo son un caldo de cultivo para la corrupción y la falta de transparencia. Por ejemplo, en muchos lugares existen mecanismos que determinan que es necesario realizar un concurso de oposición para obtener una plaza, sin embargo, no se realizan y la gente accede por otros medios a la plaza laboral en donde se trabaja por años. El resultado final, no se utilizan estos concursos de manera abierta, y tampoco se tiene la seguridad de permanecer en la plaza. El resultado más frágil posible con todos los problemas de la falta de transparencia y de precariedad laboral: 

 J. da clases de Lectura desde hace más de 35 años en el Colegio de Ciencias y Humanidades plantel Sur; sin embargo, no tiene base o planta; vive con la incertidumbre de que probablemente ya no se le expida contrato temporal al año entrante y se quede sin empleo. Tan sólo en los cinco planteles del Colegio de Ciencias y Humanidades hay decenas de maestros en la misma situación. C. lleva 25 años laborando en dicha institución, en el plantel Oriente, como profesor de Matemáticas y Computación. En 2007 demandó al CCH ante la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje porque no aceptó abrir un concurso de oposición cerrado para obtener la definitividad de su plaza. Dos años más tarde, la junta emitió un laudo a su favor y ordenó a la UNAM abrirle el concurso. Desde entonces, ya han pasado dos años, pero la institución se niega a acatar el juicio. “La Universidad no acató la orden y me ha dado muchas largas por lo que pienso que está violando mis derechos universitarios y laborales (...) Me ha costado tiempo para obtener la definitividad, no tengo estabilidad en el trabajo”.  El profesor de Biología, E., con 37 años de experiencia se encuentra en la misma situación: un juicio ganado hace más de un año que ha sido ignorado o retrasado con argumentos ajenos a los que motivaron el litigio.

 Hay dos grandes problemas que tenemos que resolver de manera creativa, son dos problemas que impiden que empecemos a poner los cimientos para una sociedad basada en el conocimiento. Trabajos bien pagados y con seguridad social, y una educación de buena calidad. Son necesarios estos dos elementos. Podemos tener una educación de alta calidad, pero sin buenos trabajos generamos desempleados y emigrantes. Podemos tener mejores trabajos, pero sin una buena calidad serán ocupados por inmigrantes. Así de simple.





4 comentarios:

Anónimo dijo...

entre tantas cosas, algo bueno puede salir de este tipo de movimientos, no? http://bit.ly/pONLqy

Anónimo dijo...

No!

Anónimo dijo...

NOooooooooooo!!!!!!!!!

Anónimo dijo...

no entiendo que tiene que ver la imagen con el tema, la persona en la fotografia ni siquiera es de mexico!!