sábado, octubre 22, 2011

fomentar la lectura en internet para crear una cultura lectora

Es necesario impulsar la sociedad basada en el conocimiento. Una estrategia es fomentar el gusto por la lectura. Se crea un canal en internet para fomentar la lectura:

El Ministerio de Educación de España y la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI), entre otras entidades, puso en marcha el Canal Leer de televisión en internet para fomentar la lectura en esa región en todos los contextos y formatos. Canal Leer, desarrollado a través del centro virtual http://www.leer.es/, está ubicado en la plataforma NCIwebtv (http://www.nciwebtv.tv/). Nace por la necesidad de un instrumento audiovisual en la era digital que acompañe las estrategias gubernamentales, institucionales y académicas, educativas y culturales, para potenciar el atractivo y la importancia de la lectura.

El libro infantil también comienza su tránsito al mundo digital:


La Feria Internacional del Libro Infantil y Juvenil (Filij) 2011 tiene presencia de más de 300 fondos editoriales, un centenar de presentaciones de libros, 130 actividades de narración oral y más de 70 artísticas, a desarrollarse en el Centro Nacional de las Artes (Cenart), del 11 al 20 de noviembre. La feria tendrá como eje la promoción de la lectura y el libro mediante el aprovechamiento de nuevos formatos tecnológicos. Laura Emilia Pacheco, directora general de Publicaciones del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) afirma que “Vivimos una revolución tan importante como la que se vivió en tiempos de Gutenberg, por eso Conaculta ha hecho un esfuerzo muy grande por promover los actos culturales en los formatos tradicionales y, además, en los nuevos formatos, de las que debemos aprender cuáles son sus posibilidades y ventajas.” Una de las novedades es la apertura de un pabellón multimedia, en el cual se experimentarán esas nuevas formas de lectura, además de promover la creación narrativa y visual de diferentes tipos de texto. En este marco se hará entrega del primer Premio Internacional del Libro Animado Interactivo en Español, a cuya convocatoria respondieron 45 propuestas de siete países.

Como no todo es alta tecnología en el leer, se inicia un diplomado para atraer a la lectura a niños de 0 a 6 años:

¿Bebés lectores? Sí. Y mientras más pequeños se inicien en la maravillosa experiencia de la lectura, incluso desde el vientre materno, mejor. La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), por conducto del Instituto de Investigaciones Filológicas (IIF) comenzará el primer diplomado Lectura en primera infancia, dirigido a profesionales dedicados a la atención de niños entre 0 y 6 años. En el curso se profundizará en el estudio de la lectura en primera infancia, desde enfoques pedagógicos, lingüísticos, literarios, síquicos y sicológicos. Las sesiones del diplomado Lectura en primera infancia se efectuarán los miércoles de 16 a 20 horas. Participarán, entre otros destacados panelistas: Ana Serrano, Carmen Leñero, Celia Díaz Argüero, Concepción Company Company, Daniel Goldin, David García Pérez y Sergio Ibáñez Cerda. Informes e inscripciones con Aarón Polo López o Cecilia López Coreño a los teléfonos 56 22 74 91 y 56 22 74 85 ext.128, y en la página de Internet: filologicas.

Y de paso se critica el programa de lectura de la SEP:

El programa de lectura rápida que la Secretaría de Educación Pública (SEP) implementó el año pasado para ser aplicado en las escuelas primarias y secundarias del país, denominado Competencia Lectora, “es absurdo y no tiene sustento pedagógico”, afirma Eva Jánovitz, coordinadora del diplomado Lectura en primera infancia, que se impartirá en el Instituto de Investigaciones Filológicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). La especialista añade que “a muchos niños que más o menos habían agarrado el gusto por los libros gracias a sus bibliotecas de aula se les va a ir el entusiasmo por una medida de presión que no les corresponde”.  Jánovitz señala que colegas de la SEP comentan que la lectura rápida “es una medida retomada de otros países, en los cuales no fue incorporada de manera aislada, como sucede aquí, sino forma parte de toda una metodología inexistente en México”.

Una cadena de tiendas lanza su programa de fomento a la lectura:

La cadena de tiendas Sanborns lanzó un programa de fomento a la lectura dirigido a sus clientes, a través de la conformación de Círculo Sanborns, mediante el cual se organizaban charlas con café, videochats y firmas de libros exclusivas; el programa entra a una segunda etapa con la campaña publicitaria Leas donde leas. . Con el apoyo de editoriales como Random House Mondadori, Océano, Santillana o Planeta, se contempla la participación de escritores como Alberto Ruy Sánchez, Guadalupe Loaeza, Antonio Malpica, Eugenio Aguirre, Bernardo Fernández BEF y Felipe Fernández del Paso. La idea es fortalecer la vinculación entre creadores y sociedad. De acuerdo con Eugenio Aguirre, este tipo de encuentros con los lectores permite sacar de la soledad a los escritores, al tiempo que los lectores dejan de ser anónimos. Leas donde leas pretende ser una campaña publicitaria que incite a la lectura desde cualquier parte de la ciudad, no sólo desde el interior de la cadena de tiendas.

Conaculta adquiere la biblioteca del poeta Alí Chumacero:


Luego de algunos meses de negociación, el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) adquirió, en 24 millones de pesos, la biblioteca personal del poeta Alí Chumacero, que contiene cerca de 50 mil ejemplares, entre libros, folletos y publicaciones periódicas. Ese acervo que es rico en libros sobre culturas de la antigüedad, literatura, historia, antropología, psicoanálisis, arte, ciencias sociales y espiritismo; y en la que destacan facsímiles de códices, obra sobre arte y escuelas artísticas de diferentes países del mundo. El fondo bibliográfico del poeta y editor ocupará dos crujías de la Biblioteca de México José Vasconcelos. El proyecto arquitectónico  busca mantener la atmósfera que tenía la biblioteca en la casa de Alí Chumacero, por eso la familia ha dado en comodato a Conaculta un busto en cantera del artista Luis Ortiz Monasterio, que estaba en la casa del poeta; así como dos óleos de la colección del artista, uno de Víctor Gutiérrez y otro de la artista Fitzia. El acervo que cuenta con volúmenes del siglo XVIII, como las Obras espirituales, de San Juan de la Cruz, de 1703, y el Diccionario de gramática, del humanista español Antonio de Lebrija, publicado en 1792; así como varios títulos del siglo XIX, es rico en ediciones numeradas y libros con dedicatoria de sus autores, entre ellos Octavio Paz, José Vasconcelos, Rómulo Gallegos, Max Aub, Rosario Castellanos, Carlos Pellicer, Elías Nandino, Gilberto Owen, Xavier Villaurrutia, Juan Rulfo, Luis Cardoza y Aragón, Carlos Fuentes y Salvador Elizondo.

¿Y qué buen libro recomiendas?



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