sábado, agosto 29, 2009

¿Tecnología en la escuela? Poco probable

Durante los últimos 200 años se ha hablado de transformar el sistema educativo del mundo utilizando las nuevas tecnologías. En 2009 la tecnología rodea la escuela pero no entra en ella. Solamente entran los lindos discursos:

Para hablar del uso de la tecnología en la educación, primero que nada se debe entender la necesidad de modernizar, reconfigurar los sistemas educativos en el mundo, ya que el proceso de enseñanza-aprendizaje, es decir, que un profesor sea el dueño del conocimiento y los alumnos sólo repositorios de este conocimiento, ya está superado. “Para lograr una mejora en este proceso enseñanza aprendizaje hay que cambiar de maestro a facilitador a través de varias técnicas didácticas y una vez que se logre esto es cuando entra la tecnología a mejorar la educación”, aseguró Juan Pablo Durán, especialista en relaciones e intercambios con universidades de IBM México.

La realidad es más compleja, los servicios de telecomunicación siguen siendo caros:

México no sólo reporta los servicios de telecomunicaciones más caros entre los países miembros de la OCDE, sino también al compararse con economías similares del continente, en especial en los costos de Internet, por lo que el gobierno federal debe reevaluar la situación del sector. Para el presidente de The Competitive Intelligence Unit (CIU), Ernesto Piedras, en países como Argentina, Brasil, Chile y Colombia "se entregan servicios con capacidades de dos y cuatro Megabits por segundo (Mbps) por un promedio de 21 dólares. "Mientras que por ese mismo precio, en México se ofertan servicios de sólo un Mbps en promedio por el acceso de banda ancha". Destacó que por ello tanto la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) como la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel) deben intensificar su política de promoción de competencia, inyección de nuevas tecnologías y de reducción de las estructuras de costos, para mejorar la posición de México en el ranking de la OCDE.

Tampoco existe un verdadero apoyo a jóvenes que se entusiasman con la tecnología:

Cuando Anabel Berumen imagina cómo bailará el robot de tamaño natural que planea armar para competir en Singapur en 2010, sus ojos brillan de emoción. Construir robots es su pasión y la de Adrián Sánchez y Alexei Tenorio. La vocación de darles “vida” y dotarlos de “inteligencia” logró que estos adolescentes obtuvieran en Austria el tercer lugar en el concurso internacional de robótica Robocup, en julio de 2009. Sin embargo, no tienen el apoyo total de su escuela, el CCH Azcapotzalco. Un año antes, en China, merecieron un reconocimiento por la creatividad de su proyecto: una recreación con robots de la leyenda azteca , mezclada con un baile que ellos ejecutaron. Ellos han logrado poner el nombre de la UNAM y de México en alto en competencias mundiales y no obstante, su escuela no les ha asignado un salón adecuado para su trabajo, ni un sitio seguro para guardar sus materiales. No reciben el apoyo económico que en otros planteles se da por ser parte del proyecto que compite a nivel internacional. La profesora Leticia Cerda, encargada del club de robótica en Azcapotzalco, reclama el desdén de la dirección del plantel: “He pedido una sede y me han dicho que lo resuelva como pueda”. Incluso le sugirieron que se los llevara a su casa.

Es más probable que las nuevas tecnologías sigan rodeando a las escuelas:

El jefe de Gobierno capitalino, Marcelo Ebrard, inauguró el primero de 50 cibercentros gratuitos que se instalarán en la Ciudad de México, 22 de ellos en las estaciones del Metro, para garantizar a los usuarios y a los capitalinos el acceso a la tecnología digital. En la estación Zócalo, sostuvo que esa iniciativa responde a la necesidad de brindar acceso a las nuevas tecnologías, principalmente a los jóvenes, pues más de 62% de los habitantes de la capital no tienen acceso a internet.Con una inversión de más de 20 millones de pesos, el Programa Cibercentros colocará 22 módulos en 20 estaciones de esa red de transporte, y el resto en distintos puntos de las 16 delegaciones políticas. Cada uno de los centros de cómputo tendrá 25 máquinas de escritorio con banda ancha y acceso a la llamada red de redes.

Piezas arqueológicas que en los años sesenta quedaron en manos de ingenieros civiles al encontrarlas en sus construcciones en la Ciudad de México, hoy están resguardadas por la Fundación Cultural Armella Spitalier, con las cuales ha creado E-books de temas precolombinos, para la venta mundial. Son más de cuatro mil objetos prehispánicos que la fundación, creada en 2004 por Carlos Alberto Armella, recibió en donación y tras registrarlas en el Instituto Nacional de Antropología e Historia, las ha restaurado y formado proyectos educativos. “Algunas piezas se recibieron ya registradas pero la mayoría nosotros hemos hecho el proceso de autenticidad y registro; las piezas pertenecen al Estado y nosotros sólo somos un salvaguarda, con el fin de divulgar la cultura prehispánica en el mundo”, comenta Valeria Armella, directora de la fundación.

Estafiate, bugambilia, gordolobo, epazote, árnica, manzanilla, sábila, ajo y nopal, pueden ser una receta para curar el empacho, la tos o un malestar estomacal, pero además forman parte del cuadro básico de plantas de la medicina tradicional mexicana que utilizan parteras, curanderos, yerberos y hueseros indígenas en su práctica cotidiana. Aunque las mexicanas son capaces de citar al menos 20 plantas medicinales de las más de cinco mil especies que existen en el país, no contaban con mayor información. A partir del 26 de agosto podrán acceder de manera pública y gratuita a la Biblioteca Digital de la Medicina Tradicional Mexicana, creada por la UNAM a través del Programa Universitario México, Nación Multicultural

Una enciclopedia en internet que busca describir todos los tipos de animales y plantas sobre el planeta llegó a 170 mil artículos y está ayudando a investigaciones sobre el envejecimiento, el cambio climático e incluso la expansión de los insectos nocivos. La Encyclopedia of Life (http://www.eol.org), un proyecto lanzado en 2007, cuyo costo ronda los 100 millones de dólares, busca describir las 1.8 millones de especies conocidas en el plazo de una década

Sin embargo, las nuevas tecnologías han creado a los Numerati que viven de la información que se genera:

Cada compra que realizamos, cada llamada telefónica, cada click que damos para abrir una página de internet, da información sobre nuestros gustos y hábitos de consumo, que son aprovechados por los numerati, científicos que traducen esta información y la venden a las empresas, explica el escritor estadunidense Stephen Baker en su libro Los Numerati. En entrevista con Baker indica que “son miles de analistas cuyo trabajo es confrontar los datos o huellas que dejamos los seres humanos al hacer las compras en el supermercado, buscar información en internet, ir al cine y pagar con la tarjeta de crédito, entre otras actividades”.

El proyecto de Google para crear la biblioteca imposible de Borges sigue en suspenso:

El ambicioso proyecto de Google de digitalizar millones de libros para su biblioteca virtual, ya cuestionado en la justicia, tiene nuevos opositores: los pesos pesados estadunidenses de internet Microsoft, Amazon y Yahoo unieron sus fuerzas para hacerle frente. Los tres grupos se unieron a la Alianza del Libro Abierto (Open Book Alliance), que encabeza un célebre abogado de Silicon Valley. La alianza quiere cuestionar ante la justicia un acuerdo amistoso que alcanzaron el pasado octubre Google, autores y editores, aún no finalizado y que permitiría saldar una demanda colectiva contra la biblioteca en línea del líder mundial de los motores de búsqueda.

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