Las lecturas han demostrado poseer la capacidad de crear en los niños y las niñas capacidades para construir amistades.
En una pintoresca crónica el sr. Felipe de Jesús Calderón se preocupa por la falta de lectores en México, (tal vez, podría comenzar con su predecesor que se ufanaba de no leer ni en defensa propia). Para dar el ejemplo de su gusto por la lectura, lee unos fragmentos de El Principito. Mientras se lee el texto de 5 grado de primaria, la minifaraónica Biblioteca Vasconcelos sufre deterioros constantes en su edificio y acervo.
¿Este presunto gusto impulsará iniciativas efectivas o quedará como una ocurrencia pintoresca como las que acontecían con el gobierno del sr. Vicente Fox?
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