El cambio de rector de la UNAM provoca distintas reacciones:
El proceso de cambio de rector en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) ha tenido un desarrollo inusual: genera consenso y legitimidad, señala Alejandro Álvarez Béjar, catedrático con 35 años de trayectoria en la Facultad de Economía. Pero enseguida apunta una dura crítica; como en el siglo XIX, “la UNAM está básicamente dividida entre liberales y conservadores, quienes han convertido a la institución en un espacio de concertación entre elites, donde se enfrentan los proyectos de control corporativo de las profesiones”.
El fondo de la discusión en el próximo proceso de elección de rector en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) debe centrarse más en el proyecto que en la persona, sostiene el investigador Ángel Díaz Barriga, integrante del Instituto de Investigaciones sobre la Universidad y la Educación Pública. Agrega: “La pregunta anterior al quién es la persona adecuada (para el cargo), tendría que ser qué necesita el país de la UNAM”.
Entre los integrantes de la Junta de Gobierno (JG) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) ha causado contrariedad el que algunos de los aspirantes a suceder al rector Juan Ramón de la Fuente “se adelantaran” y que desde hace varios días realicen declaraciones públicas sobre su pretensión. Sin embargo, aseguran que una de las líneas que mayor peso tendrá en el proceso de designación será que quien llegue a ese cargo “sea un impulsor del carácter social de la UNAM, para enfrentar las necesidades sociales, económicas, científicas y culturales del país”. El candidato(a) deberá basar su proyecto en la defensa de la universidad pública, la lucha contra la desigualdad social y el carácter laico de la institución; además de contar con un plan académico que impulse y haga crecer “aún más” a la institución.
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