el presidente del empleo apenas unas semanas atrás designó (prerrogativa aristocrática heredada de nuestro autoritarismo) al nuevo director general del Instituto Politécnico Nacional (IPN). De esta antidemocrática designación se nombró a la primera directora. Desde el punto de vista de la directora los problemas que son importantes resolver son las becas a estudiantes y la falta de apoyo financiero del gobierno federal:
Con una población estudiantil de 350 mil jóvenes, de los cuales 70 por ciento provienen de familias de escasos recursos, pues sus ingresos son menores a cuatro salarios mínimos, el Instituto Politécnico Nacional (IPN) considera que existe alto riesgo de que 15 por ciento deserten por problemas económicos, ante los efectos de la crisis. Para revertir esa situación detectará a la población en riesgo, impulsará la entrega de becas y reforzará la calidad de los planes académicos, así como la capacitación de los docentes. Entre otros retos que deberá enfrentar el instituto ante un escenario de debacle financiera, destaca la eficiencia en el gasto y la gestión administrativa, con un presupuesto de 10 mil 200 millones de pesos para este año, frente al riesgo de nuevos recortes presupuestales. En entrevista, Yoloxóchitl Bustamante Díez, quien el pasado 12 de diciembre se convirtió en la primera mujer en ocupar la dirección general del IPN, afirmó que la autonomía del instituto es un tema complejo que se puede sustituir con una mayor participación de la comunidad en la elección de candidatos para encabezar esa casa de estudios. Al abordar otros temas, reconoció que el porrismo aún es una amenaza latente en esa casa de estudios.
Sin embargo, no critica el procedimiento aristocrático para la selección del director de su institución. Hace 200 años en este territorio se afirmó que se gobernaría bajo una república, 200 años después seguimos manteniendo un limitado reino de gente pobre, el colonialismo lo llevamos en la cabeza y nuestras prácticas cotidianas.
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