En esta temporada de elecciones políticas los ciudadanos mexicanos se han visto apabullados por informerciales de los partidos políticos. Se ha gastado enormes fortunas en una propaganda que en realidad provoca enojo y enfado:
Con más de 40 millones de espots programados por ley para el proceso electoral, las campañas políticas han provocado hartazgo entre la población. Acorde con el seguimiento de la propaganda electoral de las empresas Millward Brown e Ibope, el porcentaje de rechazo de la población a los promocionales electorales es seis veces superior a lo que en promedio hay en relación a cualquier campaña publicitaria de alguna marca comercial.
A pesar de estos 40 millones de espots, los candidatos poco dicen y poco se interesan en la realidad que viven (después de 200 años de vida independiente) nuestros pueblos originarios:
En la zona indígena de Durango primero comen los varones y, si sobra algo, las niñas; a partir de los nueve años las menores pueden ser objeto de intercambio por una vaca, un chivo o algún marranito, denunció Janette Payán, presidenta de la Fundación Semilla.
La mujer no tiene valor, vale más una vaca explica la sicóloga, quien desde 2004 trabaja con los habitantes del municipio El Mezquital, en la región tepehuana.
En la primera etapa de su niñez, agrega, la niña está propensa a la desnutrición, porque primero come el padre de familia, después los hijos varones, les sigue la madre y al final, si aún hay comida, entonces se alimentan las niñas.
Son las mujeres las últimas en alimentarse, pero son las que más trabajan en la casa: ellas van por el agua y, en ocasiones, hay que caminar kilómetros para acarrearla; ellas deben hacer las tareas del hogar, incluido el alimento que sólo probarán al último.
Fundación Semilla ha atendido a más de 100 niñas indígenas con problemas severos de desnutrición: en 2009 tuvieron el caso de una menor delgada en extremo, a la que trasladaron a un hospital de Durango, pero falleció porque su desnutrición era muy severa.
Si las niñas se encuentran ya muy desnutridas, entonces los padres de familia ordenan a la madre ya no darles de comer para ahorrarse el alimento; las dejan morir, señala con cara de asombro.
El pensamiento virreynal sigue en la mente de muchos funcionarios públicos. A pesar de que decimos que vivimos en un país multicultural, las estrategias que se utilizan en la SEP y otras instancias educativas son de homogenización y normalización. No existen las minorías:
La Evaluación Nacional de Logro Académico en Centros Escolares (ENLACE) “es discriminatoria entre el alumnado indígena de México”, de acuerdo a un dictamen del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) de hace cuatro años, dieron a conocer organizaciones civiles como Incidencia Civil en la Educción (ICE) y el Congreso Nacional Indígena y diversos profesores del país, por lo que exigen su suspensión.
Danú Hernández coordinadora del ICE –red de la sociedad civil - sostuvo que exigen la suspensión de esta prueba en las comunidades indígenas. ICE también plantea otras exigencias al gobierno federal, como “la diversificación del currículum para que se atienda la diversidad cultural y lingüística de los pueblos originarios, así como la implementación de evaluaciones diversificadas acordes al contexto de las regiones multiculturales” de México.
Propone a las autoridades educativas la aplicación de una política de educación bilingüe efectiva, “que se oponga a la pérdida de nuestras lenguas y la incorporación de los saberes y de las metodologías propias de los pueblos originarios, y su participación efectiva en esos procesos”.
En febrero del año 2011 la Conapred dictaminó que dicha prueba discrimina de forma indirecta a los y las niñas indígenas, por lo que publicó 14 resolutivos que la SEP debe acatar para reparar el daño.
El documento de los resolutivos en la parte de motivación y fundamentación concluye que se está ante una violación a los derechos humanos, en específico al derecho a la no discriminación. Sin embargo, hasta el momento, ni Conapred ni la Secretaria de Educación Pública “plantean propuestas de solución que garanticen un verdadero derecho a la educación de las niñas y niños indígenas”.
El referido dictamen se dio después de la denuncia interpuesta en julio de 2008 por parte de profesores de la escuela primaria El Porvenir del estado de Chiapas, quienes demandaron a la SEP ante Conapred (CONAPRED/DGAQR/419/08/DR/II(CHIS/R289), por la aplicación de la evaluación ENLACE a los niños y niñas de los pueblos originarios.
Y con demasiada frecuencia, las escuelas que existen en los pueblos originarios son precarias:
El director del Instituto Guerrerense para la Infraestructura Escolar, José Efrén López Cortes, dio a conocer que ya está en marcha la demolición de escuelas con daños estructurales por el sismo de 7.4 grados registrado el 20 de marzo.
López Cortés informa que son 31 escuelas las que requieren de la demolición total, tras los daños provocados por el sismo.
Las escuelas más dañadas se ubican en Ometepec y Xochistlahuaca, este último municipio habitado casi en su totalidad por indígenas amuzgos.
El primer plantel que se va a reparar es el de la Secundaria 50, que tiene seis aulas y en la que se van a invertir al menos 8 millones de pesos.
En dicha escuela hay una población cercana a los mil estudiantes, a quienes la autoridad no quiso exponer a sufrir un percance y por eso optó por hacer la declaratoria de pérdida total.
Parece que en este contexto electoral, son los jóvenes universitarios quienes están más interesados en buscar alternativas para mejorar las condiciones de nuestros pueblos originarios. En el denominado "tercer debate" con los candidatos de los principales partidos políticos de mexico, fueron los jóvenes quienes realizaron preguntas pertinentes sobre las condiciones de los pueblos originarios. Y más que las respuestas obtenidas de los candidatos, resulta más importante para el futuro del país, el preguntarse ¿Qué tipo de mundo queremos vivir?
Si te interesa conocer qué desean saber los jóvenes universitarios de México puedes ver el debate completo aquí.
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