Las personas que mantienen el cerebro activo durante toda la vida con actividades cognitivamente estimulantes, como la lectura, la escritura y juegos tienen menos niveles de una proteína vinculada con el mal de Alzhéimer. Según un estudio publicado en la edición on line de la revista Archives of Neurology, los escáneres cerebrales han revelado que aquellos que han realizado este tipo de actividad tienen niveles reducidos de la proteína beta-amiloide, que forman las placas seniles en el cerebro de los pacientes de Alzhéimer. Las placas seniles son las que se forman debido a la acumulación de proteínas beta-amiloide, que se concentran formando unos cúmulos u ovillos impenetrables que afectan a la transmisión entre las células nerviosas del cerebro. Aunque estudios previos ya habían sugerido que realizar actividades mentales para estimular el cerebro podrían contribuir a evitar el Alzhéimer en la edad adulta, este nuevo estudio identifica el factor biológico, lo que puede ayudar a diseñar nuevas estrategias en los tratamientos. "Estos resultados apuntan a una nueva forma de pensar acerca de cómo el compromiso cognitivo a lo largo de la vida afecta al cerebro", dijo uno de los investigadores principales del estudio, William Jagust, profesor del Instituto de Neurociencia de la Facultad de Medicina de la Universidad de California.
Sin embargo, México fomenta el alfabetismo no funcional, según las estadísticas hemos dejado de ser un país analfabeta.... leemos pero solamente para pasar de panzazo la educación básica. Y los mexicanos no disfrutan de la lectura:
En la década reciente, México cayó 10 puntos en el número de alumnos de 15 años que leen por placer, lo que situó a nuestro país como una de las naciones de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) donde más disminuyó la lectura por gusto entre ese sector de estudiantes. De acuerdo con in Focus, reporte del Programa Internacional para la Evaluación de los Alumnos (Pisa, por sus siglas en inglés), del organismo internacional, el promedio de alumnos que dijeron leer diariamente por placer descendió cinco puntos porcentuales en el periodo 2000-2009 entre los países miembros. Sin embargo, México superó por el doble esa cifra. Junto con este país, Finlandia, Portugal y Letonia, se caracterizaron porque disminuyó el porcentaje de alumnos que consideran un goce la lectura. En 2000, 60 por ciento de los estudiantes de 15 años y 77 por ciento de las mujeres leían por placer, pero para 2009 esos porcentajes disminuyeron a 54 por ciento y 74 por ciento, respectivamente, en los estados de la OCDE. De acuerdo con la Encuesta Nacional de Lectura, en México los mayores de 12 años leen en promedio 2.9 libros al año, mientras en España la cifra alcanza 7.7, en Portugal 8.5 y en Alemania 12, con lo cual aquí se tienen los índices de lectura más bajos del mundo.
Y no es nada fácil abrir librerías en el país:
Habitantes del barrio de La Conchita, en Coyoacán, efectuaron una protesta para rechazar la construcción de una librería del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, que se lleva a cabo en la calle de Fernández Leal. Hace dos años los habitantes de La Conchita denunciaron ante autoridades locales y federales que el proyecto no está permitido, además de que ha causado daños a un inmueble catalogado por el Instituto Nacional de Bellas Artes. Los colonos sospechan que se han utilizado certificados falsos por derechos adquiridos para la autorización de uso de suelo, expuso Jorge Martínez, vecino de la colonia.
Filtración de humedad en muros y goteras en los pasillos están presentes en la Biblioteca Vasconcelos, inaugurada en mayo de 2006 y cerrada en 2007 por fallas en su construcción. En un recorrido realizado por Excélsior se comprobó que el séptimo piso de la llamada “megabiblioteca” es el más afectado. Salitre en las paredes, pequeños charcos en el área de lectura y goteras sobre la estantería son evidentes en los pasillos del área del acervo sobre bellas artes, arquitectura, dibujo, ingeniería y ciencias médicas.Personal de limpieza consultado aseguró que las goteras son de todos los días e incluso existe mobiliario dañado con grietas por la filtración. “Hay escritorios donde se ponen a leer (los usuarios) que están dañados en medio donde les cae agua. Es más, en temporada de lluvias; nosotros ponemos cubetas y secamos con jergas”, comentó un empleado que pidió no revelar su nombre por temor a represalias. El equipo de cómputo para consultar el catálogo se cubre con plásticos y queda fuera de servicio cuando está debajo de alguna gotera o un usuario reporta humedad alrededor, añadió un responsable de las computadoras.
Leer ayuda a mantenerte joven... ¿Por qué no lees un buen libro? No lo dejes para mañana, puede ser muy tarde.
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