se aplicó la prueba ENLACE en su edición 2010

Bueno, se volvío a aplicar la prueba ENLACE en educación básica. ¿Adivinas cuáles serán los resultados? Los medios publican los mismos discursos que escuchamos desde hace tiempo:

Para aumentar la calidad de la educación en México se requieren mejores maestros y mejores padres, afirma el gobierno federal. "Mejorar la educación es la mejor manera de mejorar a México. Mientras mejores sean nuestros alumnos, mejor México tendremos y para ello necesitamos también mejores maestros y mejores padres de familia". Se anunció que los mil niños con los mejores puntajes en su prueba Enlace en materia de Historia, recibirán un reconocimiento especial.

Sin embargo, las evaluaciones no han contribuido a mejorar los aprendizajes de los estudiantes:

La Secretaría de Educación Pública (SEP) ha invertido 415 millones 250 mil 936 pesos en cuatro años de aplicación de la Evaluación Nacional del Logro Académico en Centros Escolares (ENLACE). Para especialistas en temas educativos, ese gasto ha sido inútil porque la prueba no ha influido en un mejor sistema educativo nacional. Con los recursos que se utilizaron en ENLACE de 2006 a 2009, la SEP habría instalado sanitarios, techos, ventanas y canchas en 850 escuelas de educación básica, aproximadamente. No obstante las críticas por los pobres resultados, se aplicará la prueba por quinto año a más de 15 millones 765 mil alumnos de tercero a sexto de primaria y de secundaria. Para la SEP, se trata de una evaluación que permite retroalimentar a padres de familia, alumnos, docentes y autoridades educativas para mejorar la calidad de la educación.

Uno de los principales problemas consiste en que nadie sabe con certeza que hacer con los resultados de la prueba, ni los padres de familia, ni los docentes:

David Calderón, director de Mexicanos Primero, lamentó que los padres de familia sigan sin entender la utilidad de ENLACE. Las escuelas, explicó, informan a los papás de resultados que van de 200 a 800 puntos, un rango técnico que deberían trasladar a una base de cero a diez, pues así entenderían mejor que su hijo obtuvo siete o nueve. De allí el desinterés por parte de los padres frente a los resultados, apuntó Catalina Inclán, del Instituto de Investigaciones sobre la Universidad y la Educación (IISUE), de la UNAM.Una encuesta sobre el impacto de la difusión de ENLACE, elaborada por el Instituto de Fomento e Investigación Educativa (IFIE), reveló que sólo 48% de los papás con hijos en primaria sabía los resultados de la prueba, y de ellos 14 % se enteró por internet, 17% por carteles en el plantel y 59% por el maestro. En secundaria, 54% de los padres conoció los resultados y de éstos 41% recibió el informe por la SEP, 36% lo vio en la escuela y 21% se enteró por internet. Pero quienes reciben la hoja, dijo Inclán, sólo ven una comparación de su hijo respecto del grupo, las escuelas de la región y del país, por lo que “no logran identificar en qué se equivocó el pequeño”.La especialista recordó que luego de la prueba 2006, los papás recibieron una hoja con indicadores en rojo, amarillo o verde, en función del nivel de su hijo; iba acompañada de recomendaciones que no consideraron el contexto socioeconómico de la familia.

En poco tiempo se ha implementado un monumental sistema de evaluación. Sin embargo, ahora no sabemos que hacer con él. Hay dos caminos posibles: Regresar a la escuela que funciona como una caja negra o repensamos el diseño del sistema de evaluación de los aprendizajes de los estudiantes mexicanos.