En Oaxaca

Eventos ocurridos en Oaxaca:

Maestros de la sección 59 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) recuperaron dos escuelas que la semana pasada había desalojado la sección 22, que amenazó con volverlas a desocupar con violencia si el gobierno estatal no interviene.
En tanto, maestros y padres de familia del sector de Tlacolula de Morelos intensificaron acciones de presión con la toma de las instalaciones del Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEPPO), mientras que profesores homologados bloquearon la carretera e impidieron el tránsito vehicular hacia el istmo de Tehuantepec.

Al rechazar la segunda oferta planteada por los gobiernos estatal y federal, el magisterio de Oaxaca decidió reforzar su plantón instalado en el Centro Histórico, con poco más de 11 mil profesores. Uno de los dirigentes de la Sección 22 del SNTE, Domingo Cabrera Vásquez, adelantó que las protestas continuarán hasta que se emita la convocatoria para renovar su comité seccional. Integrantes de la sección 22 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), reforzaron sus medidas de presión y desquiciaron la capital de Oaxaca para exigir que la líder nacional de su gremio, Elba Esther Gordillo, emita la convocatoria que permita renovar el comité seccional.

Cientos de mentores de la costa partieron del plantón e instalaron un cerco humano en el perímetro del principal centro comercial de la zona conocida como Verde Antequera, donde impidieron el desarrollo de actividades comerciales de pequeños empresarios, bancos y establecimientos de las cadenas nacionales. La protesta provocó que empleados de las empresas fueran retirados de sus centros laborales, porque en esta jornada las acciones se prolongaron hasta después de las cinco de la tarde.

A un año de la presunta desaparición de los presuntos activistas del Ejército Popular Revolucionario (EPR), Gabriel Alberto Cruz y Edmundo Reyes Amaya, sus familiares ubicaron un plantón frente a las oficinas de la Procuraduría de Oaxaca y frente a la Casa de Gobierno, donde despacha Ulises Ruiz, para exigir su aparición con vida. Nadin Reyes Maldonado, hija de Edmundo Reyes, resolvió que hubo un complot de estado, en el que están involucrados el Ejército y las fuerzas de seguridad estatal y federal para lograr la captura de los activistas. Dijo que hay testimonios que relatan la forma en la que fueron capturados: primero golpeados en casas de seguridad y cuarteles de la policía estatal, hasta que terminaron siendo trasladados a la zona militar. “Estuvieron involucrados funcionarios del gobierno de Oaxaca y jefes policías, quienes deben ser investigados y castigado con todo el peso de la ley”.