Para los Numerati y para los discursos políticos, se presumen la cantidad de libros de texto gratuito. Se editaron más de 175 millones de libros. Según las creencias de nuestro sistema educativo con ello, la educación es más barata. Pero también la convierte en una educación de masas, idéntica. Por ello, podemos visitar una escuela en Tijuana, otra en Morelia y una más en Mérida, y no encontrar diferencias ni culturales ni sociales:
El director general de la Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuito (Conaliteg), Miguel Agustín Limón Macías, aseguró que fueron entregados poco más de 175 millones de libros para los alumnos de 112 mil grupos escolares en todo el país. Destacó que ningún país en el mundo ha entregado de manera gratuita los libros de texto durante 50 años. Precisó que ello no ha sido un gasto sino una inversión, que en el presente año será de dos mil 400 millones de pesos con el presupuesto de la propia Conaliteg, "lo que significa un enorme ahorro para las familias mexicanas". En cuanto a los libros, mencionó que están "bien cimentados en la educación nacional y son un bien que garantiza la gratuidad, laicidad y equidad, con abasto asegurado aún en las condiciones adversas de la economía". Limón Macías dijo también que desde el año pasado todos los libros de secundaria, los de primero y sexto grado de primaria, "se encuentran en Internet para ser consultados, a fin de que los docentes los tengan a la mano como producto de la reforma integral de educación básica".
El problema surge cuando tales libros tienen errores u omisiones, ya que se replican 175 millones de veces.
Según la visión de los expertos en educación los libros han borrado del temario oficial, la etapa prehispánica y la vida en el Virreynato de la Nueva España (Mal llamada Colonia por los expertos en educación; existen diferencias sustanciales entre el encontronazo y conquista en América que lo ocurrido en África). Esta situación ha levantado la ira del congreso, una ira que no se manifiesta con el recorte a la educación, o con la venta de plazas en el magisterio, o con los pésimos resultados en las pruebas nacionales e internacionales. Un par de temas de historia provoca más ira que los bajos niveles de acceso en la secundaria y el bachillerato, de la exclusión de los jóvenes de los centros escolares...
El presidente del Senado, Gustavo Madero, coordinador del Partido Acción Nacional, hizo un llamado a revisar la mutilación de episodios como la conquista en los libros de texto de la Secretaría de Educación Pública para los niños de primaria.
La Comisión de Cultura de la Cámara de Diputados definió como atentado a la cohesión e identidad nacionales la decisión de la Secretaría de Educación Pública (SEP) de suprimir la Conquista y la Colonia de los libros de texto gratuito pues, señaló, los conocimientos históricos son formadores de dichos principios. El presidente de la comisión legislativa, Alfonso Suárez del Real, aseguró que también se trata de una traición al legado de José Vasconcelos, quien configuró un programa educativo en el que la historia es fundamental para definir la identidad y la cohesión del país.
La diputada Beatriz Pagés Llergo Rebollar (PRI) defendió la validez de estudiar la historia de la Conquista en la Primaria, de cuyo texto de historia fue retirado dicho episodio, y dijo que como nación, México tiene pendiente la reconciliación en torno del choque entre las civilizaciones indígena y española. Criticó que las "modificaciones" a la historia de México se apliquen “en un momento de crisis económica profunda, al filo de los estallidos sociales”, lo cual “ahonda la división, el enfrentamiento y el divorcio entre mexicanos”. Pagés Llergo, secretaria de la Comisión de Cultura en la Cámara de Diputados, dijo que “el hecho de que la SEP haya decidido mutilar en los libros de texto la epata de la Conquista de México, conforma una actitud --no quiero utilizar la palabra racista, porque sería muy fuerte--, una tendencia a ignorar la importancia de la cultura prehispánica en el país
Los libros de texto que hoy reciben alumnos de primaria contienen “graves retrocesos y errores”, advertidos por especialistas a la Secretaría de Educación Pública (SEP), dependencia que al final consideró “una necesidad imperiosa” entregarlos a tiempo aunque sean “perfectibles”.
En materia de historia, Olac Fuentes Molinar, investigador de la Universidad Pedagógica Nacional y ex subsecretario de Educación Básica, menciona que el plan de estudios es “muy extraño” porque “se trataba de articular una historia de México con la humanidad, que abordaba la Conquista, la Colonia”. Sin embargo, el académico afirmó que el tema fue recortado porque no llega ni a la Conquista. Desde su perspectiva, la Reforma Integral de la Educación Básica es “caótica”, presenta excesos de información, solicita al padre de familia muchos materiales en tiempos de crisis económica, tiene inadecuaciones al lenguaje de los niños y pide, entre otros puntos, que se domine la lectura en el primer grado.
Pese a que la Secretaría de Educación Pública (SEP) aseguró que los temas de la Conquista y el periodo colonial están incluidos en el libro de cuarto año de la Reforma Integral de Educación Básica (RIEB), de acuerdo con una copia de dicho título en poder de este diario se constató que no incluye esos tópicos, ya que dicho volumen –que según el propio subsecretario de Educación Básica, ya está terminado– solamente está integrado por dos bloques llamados Del poblamiento de América a los inicios de la agricultura y Mesoamérica. Por otro lado, también se verificó que en el libro de quinto de la reforma, la Conquista y la Colonia no se incluyen, ya que inicia con los primeros años de la vida independiente de México. Así, este texto está conformado por los siguientes cinco bloques: Primeros gobiernos e intervenciones; Segunda mitad del siglo XIX; Finales del siglo XIX y principios del XX; El camino al México moderno, y El México contemporáneo.
Si todos los argumentos publicados fueran acertados, se verificarían en la sociedad actual; desde hace 50 años los temas de la conquista y el virreynato estuvieron en los libros de educación básica. Sin embargo, nuestra sociedad sigue siendo racista, en especial con las comunidades indígenas; inequitativa, pocos tienen todo, los demás nada; autoritaria, no nos importan los derechos humanos, menos los derechos del niño; analfabeta funcional, leemos demasiado poco y lo que leemos no lo analizamos de manera crítica.
Entre tanto, el subsecretario defiende los nuevos libros gratuitos:
Los libros de texto gratuito para educación básica no contienen errores, aseguró el subsecretario de Educación, Fernando González, quien aseguró que la ausencia de temas como la Colonia y la Conquista se subsanan con su inclusión en otros grados de enseñanza como en la secundaria. En entrevista, previo al inicio de la ceremonia del arranque del ciclo escolar a la que asistió el presidente Felipe Calderón, Fernando González rechazó que estas modificaciones sean fallas aunque dijo que la SEP está dispuesta a rectificar porque la opinión de todos debe de ser considerada
No hay comentarios:
Publicar un comentario