Reanudaron labores las 17 preparatorias del gobierno del Distrito Federal, tras aceptar la propuesta que la Junta Local de Conciliación y Arbitraje ofreció a los trabajadores del Sindicato de la Unión de Trabajadores del Instituto de Educación Media Superior (SUTIEMS). Aunque el incremento salarial se mantuvo en la oferta de 3.3% directo al salario, se les ofreció a los trabajadores mejoras en prestaciones e integración salarial al sueldo base.
Sin embargo, en un territorio en donde lo más importante son los discursos y no necesariamente la realidad, algunas preparatorias parecen continuar la tradición que dejó el terremoto de 1985, establecerse en sitios para "damnificados":
En la preparatoria José Revueltas Sánchez del gobierno capitalino se imparten clases desde hace tres años en aulas de lámina instaladas en el estacionamiento de la delegación Venustiano Carranza. Con la promesa de que serían reubicados, los alumnos y maestros aceptaron trabajar en condiciones desfavorables; sin embargo, la primera generación ya se fue y aún no se cumple. Sin laboratorios ni biblioteca propia, esta preparatoria busca desde entonces que se le proporcione un inmueble, pero la falta de presupuesto y de un predio son los pretextos que les han dado. Hace tres años, cuando se inauguró la escuela, a los profesores les dijeron que de manera temporal la sede sería la parte trasera de la demarcación, donde diariamente se imparten clases a más de 200 alumnos de diferentes grados.
Tengo la impresión que se olvidarán de ellos, al menos hasta que pase el delirio de que los ratones verdes ganarán el mundial de fútbol. ¿Cómo se ven los comerciales de los políticos en tu telezota de 40 pulgadas?
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