El 2009 no parece ser un año alegre, la crisis financiera mundial y los paros que se realizan en distintos estados federales no producen sonrisas. Los paros afectan todo el sistema educativo, desde la educación básica hasta el nivel universitario:
En Sonora, unos 50 maestros del Colegio Nacional de Educación Profesional Técnica (Conalep), en huelga desde el 8 de febrero, se manifestaron por las principales calles del centro de la ciudad de Hermosillo para denunciar agresiones y falta de interés de las autoridades para solucionar el conflicto, que mantiene sin clases a 10 mil alumnos de 15 planteles de la entidad. Ramona Risk Fontes, dirigente del sindicato del Conalep, aseguró que profesores de la institución han sido atacados a pedradas por desconocidos tanto en sus domicilios como en las guardias que realizan a las puertas de algunos planteles, donde hace 17 días colocaron las banderas rojinegras.
En Tijuana, 380 profesores afiliados a las secciones 2 y 37 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) suspendieron labores en Los Santorales en demanda de que se aclaren las muertes de 13 niños, adolescentes y jóvenes, ocurridas en los cinco meses recientes por causas desconocidas. Los educadores, que dejaron sin clases a 6 mil niños de educación básica, se reunieron con funcionarios del sector salud y del sistema educativo estatal, quienes les informaron de las medidas preventivas que se han aplicado en esa región de Mexicali, formada por unas 20 colonias populares con nombres de santos.
En Guerrero, unos 500 estudiantes de la Escuela Normal de Ayotzinapa informaron que no han tenido clases desde hace dos semanas, porque una treintena de docentes están en paro debido a que la Secretaría de Educación de Guerrero (SEG) no les ha pagado, desde hace dos años, viáticos por asesorar a los normalistas y evaluar las prácticas y proyectos que éstos realizan en comunidades guerrerenses.
Integrantes de los sindicatos de académicos y empleados de la Universidad de Sonora realizaron un paro de labores en demanda de que las autoridades atiendan su reclamo de mejoras salariales y contractuales, lo que afectó a 30 mil estudiantes. Dorotea Rascón, dirigente del Sindicato de Trabajadores y Empleados, y Sergio Barraza, líder del Sindicato de Trabajadores y Académicos (Staus), informaron que la medida se tomó luego que las autoridades no han mostrado disposición al diálogo.
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