El tema de la venta de plazas en la SEP es siempre un tema candente:
La dirigente del SNTE expuso que la venta de plazas es un tema que preocupa a los magisteriales, pues, si bien es cierto que no hay casos documentados de ello, se trata de una situación en la que los mismos trabajadores de la educación manifiestan con insistencia que ocurre en el sistema educativo nacional. Señaló que “siempre ha estado ese comentario, que en el sindicato se venden plazas, que en la SEP se venden plazas, no me pidan nombres, porque si tuviera las pruebas, seguro estarían en la cárcel”. Sentenció, “no más ventas de plazas ni de la autoridad educativa ni del sindicato”. La lideresa reconoció las debilidades en el sector educativo, por ejemplo, inequidad, falta de oportunidades y marginación. Enfatizó la necesidad de implementar un sistema de profesionalización y capacitación para los docentes. Lo anterior, dijo, con miras a que sea a partir del compromiso con la enseñanza como se otorguen las plazas.
A veces, no se realizan las tareas de la plaza:
La presidenta del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Elba Esther Gordillo Morales, cobra dos salarios dentro del magisterio mexiquense: uno de directora y otro de profesora de primaria. Sin embargo no ejerce ninguna de las dos funciones, pues como cientos de profesores de todo el país, está comisionada –licencia con goce de sueldo– para realizar tareas en el sindicato. En la misma situación se encuentra el secretario general, Rafael Ochoa Guzmán, sólo que éste ocupa la plaza de jefe de sector de educación primaria, cuya licencia con goce de sueldo le fue renovada el pasado primero de enero con vigencia hasta el 31 de diciembre de 2008.
Jóvenes estudiantes piden plazas al gobernador del Estado de México:
“¡Gobernador! ¡Gobernador!”, gritaban eufóricas las estudiantes de la normal de Atlacomulco, en busca de captar la atención del mandatario mexiquense, Enrique Peña Nieto.
Después de unos cuantos gritos más, el Ejecutivo finalmente volteó y les sonrió.
–Por favor, apártenos una plaza –suplicaron las jóvenes entre risas.
–¿Qué pasó? –respondió Peña. Un joven de traje le susurró algo al oído–. Perdón, no entiendo.
“Queremos una plaza”, soltó una joven teñida de rubia, quien al cruzar la mirada con la del gobernador se escondió entre sus compañeras, que minutos antes cantaron en una ceremonia por el natalicio del catedrático, escritor y diplomático Isidro Fabela, en la plaza principal de Atlacomulco, tierra de Enrique Peña.
–¿Una plaza?
–Sí –respondieron a coro más de 20 estudiantes de la normal, vestidas con uniformes azules y faldas tableadas a cuadros.
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