Al presentarse los tristes resultados del concurso nacional para obtener plaza en el sistema de educación básica, los maestros protestan y piden su desaparición, y la SEP pide revisar el sistema de educación normal:
Para ser profesor en México ya no hay otro camino más que acreditar un mínimo de conocimientos, de habilidades docentes, un mínimo de capacidad de aprendizaje. Los aspirantes que reprobaron el examen no cumplen con las condiciones necesarias para impartir educación en el país, por lo tanto “tendrán que prepararse, que capacitarse y tendrán que volver a presentar el examen”.
Al darse a conocer la totalidad de los resultados, destaca que los maestros en servicio de Baja California Sur obtuvieron el mejor promedio del país, mientras que los profesores de Guanajuato son los menos preparados.
Profesores de Guanajuato, Quintana Roo y Veracruz protestaron por el examen nacional para la asignación de plazas y demandaron dar marcha atrás a esta modalidad, acordada entre la dirigencia del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) y el gobierno federal. En la primera entidad –donde reprobó 73 por ciento de los 6 mil 295 docentes que participaron en el concurso, según la Secretaría de Educación Pública (SEP)–, unos 30 maestros se entrevistaron con la subsecretaria para el Desarrollo Humano de la Secretaría de Educación de Guanajuato (SEG), Martha Delgado Zárate, para demandar que se respete la bolsa de trabajo. Después de dos horas de negociaciones se convino asignar por este mecanismo los primeros 250 interinatos. Maestros que acudieron a la reunión anunciaron que este sábado protestarán frente a oficinas de la SEP en la ciudad de Guanajuato porque funcionarios del SNTE intervinieron para que se permitiera presentar el examen a docentes no titulados; además, dijeron, se distribuyeron copias con el contenido de la prueba para beneficiar a algunos grupos.
El titular de la Unidad de Planeación y Evaluación de Políticas Educativas (UPEPE) de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Jorge Santibáñez Romellón, afirmó que los datos obtenidos en la aplicación de la prueba, revelan que “lo que se está enseñando en las normales, no es lo que se enseña en las aulas”, y reconoció que se va a revisar “a fondo” el sistema de normales en México, pues consideró que “no tiene mucho sentido seguir formando maestros de primaria en las cantidades que lo hacemos hoy en día”, pues aseguró que México está “pasando de un país de niños a uno de jóvenes”. Los docentes en servicio que no aprobaron el examen nacional de habilidades y competencias para obtener una plaza en el magisterio, pero que cubrían interinatos o que están contratados por honorarios, no dejarán de dar clases. Sin embargo, los profesores en servicio reprobados serán capacitados para que puedan seguir en sus aulas. “Este examen es un cambio trascendental y es una especie de barco muy pesado y grande y se da un golpe de timón y no se echa al mar a los que están en el barco, no tiene ningún sentido, sino que se deben generar mecanismos para que sepan funcionar en el nuevo rumbo”.
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